06 agosto 2012

Yo no tenía ganas de reír, tu te reías por no llorar.

99f46d1f182f2609fc479e1988347df8_large_large

Los bares siempre han sido mis lugares favoritos para desconectar, para leer, para pensar en mis cosas. A veces necesito tiempo para reflexionar, pararme a pensar y ver que tengo a mi alrededor, que ha cambiado, que puede cambiar, como están sucediendo las cosas.
Nunca es agradable cuando te paras y ves que todo se ha desmoronado, que ya nada es como antes y que el caos se ha instalado en tu vida. Las personas, los lugares, todo está cambiando poco a poco y no te gusta, te gustaban las cosas como estaban. No entiendes los cambios, esa canción que dice "que importa si eres una perdida, si bebes, si fumas esa es tu vida" se ha convertido en tu banda sonora, pero mientras tu cambias a peor, mucha gente que te rodea cambia para mejor, o eso parece.
No quieres cambios, pero tendrás que aceptarlos, un día te dijeron "tal vez todo el mundo esté madurando menos nosotras", cuanta razón tenían aquellas palabras que en aquel momento no hicieron ningún efecto en ti y ahora recuerdas tanto.

Mientras te resignas a lo que viene pides "camarero, un tequila por cada duda, por favor". Y te das cuenta que son muchas las dudas, tarde saldrás hoy de este bar.